El hombre esclavizado solo tiene ojos para aquello que satisface su pasión, dejándolo siempre abocado al abismo de los más crueles desengaños.
Y el insensato, aquel que solo confía en los resultados del análisis y en las conquistas de la tecnica, no conserva espacio libre en su corazón para que Tú le cantes la suprema verdad de lo que permanece inasequible a la tensión y al esfuerzo programados.
Parece que sus obras llegan lejos y que sus vidas escalan pedestales de honor imperecedero; pero son como hierba que jamás se hace fruto y que nadie se acuerda de bendecir su nombre.Por muchos esfuerzos que hagan sus secuaces para mantener viva su memoria, manejando programas de televisión y falseando páginas de la historia ,nadie los recordará como benefactores! ya que solo permanece la obra que desconoce el orgullo y anuncia tu poder que todo lo sustenta.