La Verdad de Cristo: Un Llamado a la Unidad en la Iglesia Católica

La Iglesia Católica se define por su estructura jerárquica, no democrática. Este fundamento es esencial, ya que cualquier intento de introducir la democracia en su seno puede llevar a un punto de no retorno, donde se cuestionan las bases de la fe. La liturgia, la doctrina, los dogmas y las normas morales son inmutables, no negociables. La unidad de la Iglesia debe fundarse en el respeto a la Verdad de Cristo.

Quienes promueven divisiones en la Iglesia están, en esencia, desafiando la divinidad de Jesucristo. Se ha propuesto abrir los sínodos a la participación de laicos, permitiendo votaciones que involucran a personas con poca o ninguna formación teológica, a menudo asociadas a organizaciones que defienden otras doctrinas. Esta estrategia pone en riesgo la pureza de la enseñanza católica, ya que la verdad no puede ser objeto de votación.

El nuevo Papa ha manifestado su compromiso con la unidad y la protección del patrimonio de la fe y la doctrina. En tiempos en que el respeto y la adherencia a la verdad se ven amenazados, es crucial reafirmar la importancia de mantener la estructura jerárquica de la Iglesia, que asegura la transmisión fiel de la doctrina de Cristo.

En este contexto, es fundamental recordar que la Iglesia no se adapta a las corrientes democráticas del mundo moderno; por el contrario, está llamada a guiar a sus miembros hacia la verdad eterna. Unidos en la fe, debemos defender la enseñanza de Cristo, evitando la subdivisión y manteniendo la cohesión dentro del Cuerpo Místico. 

La invitación es clara: volvamos al fundamento de nuestra fe, en la esperanza de que, con la guía del nuevo Papa, continuemos construyendo una Iglesia unida en la Verdad.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Publicaciones relacionadas

Comienza escribiendo tu búsqueda y pulsa enter para buscar. Presiona ESC para cancelar.