Árboles y hombres

Cuando Jesús impuso las manos al ciego, aquel hombre sólo había recuperado media vista: Veo hombres; me parecen árboles, pero andan. Fue después de que el Señor le impusiera las manos por segunda vez cuando vio con toda claridad. No sé cuántas imposiciones de manos necesito… Quizá yo he recuperado tres cuartos de vista: a […]

Comienza escribiendo tu búsqueda y pulsa enter para buscar. Presiona ESC para cancelar.